Ante la inminente comercialización de la píldora abortiva RU-486, aprobada por la Comisión de Sanidad del Congreso, S.O.S. Familia envió 6.000 firmas al Presidente del Gobierno y 25.000 tarjetas al Ministro de Sanidad, pidiéndoles que no fuese comercializada la "píldora asesina".
Se distribuyó también ampliamente un documentado informe alertando a la opinión pública sobre los peligros de la píldora RU-486.


Se edita un substancioso estudio de S.O.S. Familia sobre los efectos nocivos que la adición a la televisión provoca en los niños y jóvenes. Dicho libro, con una tirada de 15000 ejemplares, despertó un enorme interés entre los profesores y educadores en general. 
Hogares agredidos, padres desplazados, hijos teleguiados, es el subtítulo de esta obra de 126 páginas que analiza las consecuencias de los malos contenidos de la televisión actual. La finalidad del libro es dar ánimo a los padres para que cuiden su familia de la intromisión dañina de la TV en sus hogares y mostrar cómo defenderse.
Una nueva iniciativa de S.O.S. Familia pedía a los alcaldes de las capitales de provincia que velasen por la moralidad pública, de acuerdo a la normativa existente, prohibiendo la exhibición de anuncios y portadas de revistas pornográficas en los quioscos y locales públicos.




