El Arzobispo de Sevilla, Cardenal D. Carlos Amigo Vallejo, es terminante en su defensa de la función social de la familia. "nada más corrosivo para la estabilidad de las estructuras sociales que la trivilización del matrimonio y el desamparo a la familia.

"Una buena política de apoyo, protección y ayuda a la familia es la mejor y más creíble garantía para esperar en una sociedad verdaderamente justa. Sin el matrimonio y la familia, ni hay futuro, ni posibilidad alguna de un desarrollo humanamente sostenible y de un progreso medianamente aceptable". (ABC, 15-8-05).